Este ya es otro poema A Flor L. Hoy me enojé muchísimo y envié un mail diciendo lo que quería decir (hace meses) a las estúpidas serpientes Después de ese pico de adrenalina me sentí vacía, sin fuerzas, indefensa. Tomé un café a las 20.30 (en mí casa sería la hora de la cena) pero éste ya es otro poema de esos que no valen la pena. -Pensé que era otro tema, no otro poema- me dijo la mendocina -pero ambos funcionaban- Me habló de Polanyi, un autor húngaro dijo al pasar mientras yo solo saboreaba aquella empanada de ozobuco, la que comimos en ese bar porteño al que fuimos una tardecita de primavera. Y si fuéramos a tomar un vermú a la esquina del Arte1 -pero ambos funcionaban - allí donde ese hippie italiano prepara tapas veganas escenario incompresible donde ahora me pierdo palabras rotas de mi fragmentada existencia.