A mí el lesbianismo me regaló la poesía.
Este poema me lo regaló hace pocos años mi primer amor #lesbiano.
Pero insistente, irreverente, yo digo que éste fue mi primer amor lesbiano, aquel que fue visible para mí mientras era visible para otras también, porque sucedió en un encuentro con otras feministas, algunas lesbianas, otras no, todas en íntima complicidad y ferviente deseo de acercarnos a ser nosotras mismas, con otras.
Digo mi primer amor lesbiano porque implicó en primer lugar la carne, el sudor, las lágrimas, los viajes, los encuentros, el sexo desenfrenado y sin tiempo, las complicidades, también desencuentros, ríos, activismos, piel delicada y ojos tímidos, plenarias, risas cordilleranas, libros, muchos libros, silencios, desilusión, fuegos cruzados, orgasmos mágicos, sabores nuevos, incertidumbres, pregunta y sobre todo, misterio.
Aquel poema -este poema- vuelve siempre de modo inesperado, como otros poemas que me has dejado.
Y ahora lo entiendo, solo ahora, diez años después: ser lesbiana para mí, es hacerlo como quieras, pero hacerlo con ruido.
A mí el lesbianismo me regaló la poesía.
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/Si me estás leyendo, en algún lugar del ciberespacio, a vos que me regalaste este poema, gracias ❤️ /
A todas las lesbianas y lesbianxs que me regalaron poesía/ a las que (des)hice poema.
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El poema "Ruido" es de Elvira Sastre, poeta lesbiana española.
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